domingo, 30 de marzo de 2014

Alameda del arroyo






Durante estos días se ha llevado a cabo la tala de los árboles de la conocida como alameda del arroyo; aunque este paraje realmente se corresponde con los denominados "prados concejiles", un espacio de propiedad municipal, que antiguamente se utilizaba para aprovechamiento del ganado de los vecinos del pueblo.

La razón argumentada por el consistorio, es la enfermedad que sufren estos árboles, que ataca su tronco interiormente y provoca continuas roturas y caídas de gruesas ramas, poniendo en peligro la integridad de los viandantes que pasan por esta zona.

El ayuntamiento cuenta con un proyecto para la regeneración de este paraje y el acondicionamiento del cauce del arroyo, el cual tiene previsto acometer antes de que acabe el año.

sábado, 29 de marzo de 2014

La escalera del coro


Durante el siglo XVII se acometieron obras de reconstrucción de la primitiva iglesia parroquial de Santa María Magdalena, debido al estado de ruina en que se encontraba. Entre 1713 y 1724 se completaron con la demolición y remodelación de la parte superrior de la torre-campanario que conocemos en la actualidad, pero aún faltaba un elemento por concluir: el anejo de la parte derecha de la nave, que alberga la escalera de subida a la tribuna.

Sin duda, se trata de un elemento posterior a la construcción del edificio principal, pues ya en 1691, el visitador del Arzobispado de Toledo, aunque dejaba claro que la iglesia no necesitaba de reparos, al haberse reedificado recientemente, sí matizaba que, precisamente, faltaba por hacer la escalera para la tribuna.

Es obvio que los elevados costes de ejecución material de estas obras generaban dificultades de financiación en una población de tan corto vecindario, aunque en la misma tuvieran sus haciendas importantes hacendados de la ciudad, que también contribuían con sus piadosas aportaciones. Por eso se iban acometiendo poco a poco, y dando prioridad a aquellas situaciones en que la urgencia así lo requería. Además el pueblo contaba, en aquel momento, con otras dos iglesias que también precisaban de su correspondiente mantenimiento (Nuestra Señora de Burguillos y la ermita de San Pedro, esta última ya desaparecida).

Desconocemos, exactamente, cuándo se llevó a cabo la construcción de este anexo de la iglesia, pero disponemos de un dato que nos permite conocer a partir de cuándo. Se trata del año 1721. Por aquel entonces existía una agrupación de vecinos en torno a la advocación del Cristo de la Veracruz, que formaba una "soldadesca". Su fiesta principal se celebraba  el día de la Cruz de Mayo en la ermita de Ntra. Sra. de Burguillos, destinando el dinero que recaudaban, con motivo de la misma, a la reparación y mantenimiento de la ermita. Según datos de esta cofradía, entre 1712 y 1720, fue necesario reparar los tejados de la ermita y de la casa del santero, así como levantar un cuarto nuevo, empleándose los ofrecimientos de estos años para este fin. Sin embargo, en el año 1721 ya habían concluido aquellas obras y decidieron aplicar los 152 Reales recaudados en la fiesta de ese año, para la futura construcción de la escalera de subida al coro de la iglesia, que aún no había sido construida.

martes, 25 de marzo de 2014

¿Rollo jurisdiccional o via crucis?


Viendo un poco más de cerca esta fotografía, apreciamos las dimensiones y ubicación de esta cruz, que suponemos desaparecida durante la guerra civil, planteándonos una gran cantidad de incógnitas. ¿Cuál era su función: religiosa o jurisdiccional?, ¿había dos cruces en la plaza pública o fue sustituida ésta por la que conocemos actualmente?; de ser así, ¿por qué cambió de emplazamiento?, ¿qué fue de los diferentes elementos que la formaban?, o, ¿por qué no se construyó una similar a ésta?, son muchas de las preguntas que hoy podemos hacernos.

En un principio, por su cercanía a la puerta de la iglesia y por la cruz que la remata, en lugar de la función que cumple la actual, más bien podría corresponderse con una de las estaciones de un antiguo via crucis que comenzara en la iglesia y tuviera su final en la ermita. Allí se conservan dos piedras de similares características (aunque no en su emplazamiento original), que servirían de base o peana para el  fuste sobre el que corona la cruz de hierro, como ésta y la del camino de Toledo. Junto con otra más, constituirían el calvario. De hecho, ambas peanas conservan el hueco circular donde estaría alojada la columna que servía de fuste, y existen otras muchas piedras de estas características repartidas por el pueblo, que podrían corresponderse con otras estaciones del via crucis. En cualquier caso, son todas de menor tamaño que la que apreciamos en la imagen. Esta desproporción podría justificarse por el lugar donde se encuentra -la plaza pública-, sitio en el que también podría estar representando una doble función, como rollo o picota. Lo cierto, es que siempre ha sido conocida con el apelativo de "la Cruz".



Según un documento del año 1721, la cofradía del Cristo de  la Veracruz de Burguillos habría reparado, unos años antes, estas cruces de la ermita -a las que cita con el nombre de humilladero-, durante las obras de reparación del tejado de la misma y de la casa del santero. Se da la circunstancia de que estas hermandades, han estado muy relacionadas también, en otros lugares, con la celebración de los via crucis y, precisamente, era esta cofradía la que se encargaba en Burguillos de la procesión del jueves santo.


La existencia de este via crucis, por tanto,  no tendría nada de particular en un pueblo como Burguillos, donde se ha manifestado una profunda religiosidad desde hace siglos, con una iglesia de considerables dimensiones, dos ermitas y, al menos, dos oratorios privados. Y es que, antiguamente, casi todos los pueblos tenían un via crucis al aire libre (generalmente a las afueras de la población), y así podemos encontrar, a modo de ejemplo, algunas de estas cruces de piedra -o, al menos, las peanas donde estaban erigidas-, en poblaciones cercanas como Chueca, Ajofrin, Sonseca y Orgaz.

sábado, 22 de marzo de 2014

El osario


Hasta la construcción de los cementerios municipales, que datan de una orden real de finales del siglo XVIII, los lugares básicos de enterramiento eran las iglesias, y así sucedía en Burguillos. En este sentido, existe constancia documental e incluso arqueológica, no sólo por el recuerdo que tienen nuestros mayores del osario aledaño a la iglesia, sino por las sucesivas obras de acondicionamiento del suelo de la nave, que han puesto de relieve la presencia de muchos de estos enterramientos.

Veíamos en la foto más antigüa que tenemos de la iglesia, ese pequeño recinto cerrado que se sitúa en el lateral izquierdo, a modo de chaflán, entre la esquina de la fachada y la de la torre. Cuando el piso de la iglesia se encontraba demasiado saturado y se hacía necesario renovar el suelo para un nuevo entierro -ya fuera completamente, o por el vaciado de una sepultura-, los restos exhumados se solían trasladar a los osarios. Estos espacios podían ser fosas cubiertas o cuartos, como el de la imagen, situados dentro o fuera de las iglesias; por eso no es de extrañar encontrarlo en este lugar, adosado a la misma.

Todavía hoy son visibles las huellas del lugar ocupado por este recinto, sobre el muro lateral de la iglesia , así como este "extraño" signo, de color rojo, que encontramos en una de los sillares de granito del zócalo, y del que hablaremos en una próxima entrada de este blog.



domingo, 16 de marzo de 2014

Greco 2014


¡Ya está aquí el gran momento! Greco 2014 ha abierto su gran exposición en el Museo de Santa Cruz. No podéis perderos la mayor exposición jamás reunida sobre el pintor cretense. No sólo es espectacular, sino que además os permitirá descubrir un nuevo Greco, un nuevo concepto sobre el pintor y su obra. A nadie deja indiferente el colorido que escondían muchas de sus obras y que ahora podemos observar detenidamente, gracias a sus magníficas restauraciones. Ese Greco de formas alargadas y sombrías no era sino fruto del paso del tiempo y del ennegrecimiento de sus cuadros, pero que nada tenía que ver con la concepción inicial del pintor. ¡No os lo perdáis!

La ciudad se vuelca este año con el evento y, prueba de ello, aquí os dejo una fotografía de la reproducción que ha realizado en mazapán el Obrador de Santo Tomé y que tiene expuesta en los escaparates de su tienda, en la calle del mismo nombre. Otra obra de arte, sin duda.

viernes, 14 de marzo de 2014

Via Crucis


La Hermandad del Cristo de la Fe participó en el Via Crucis Penitencial celebrado en Toledo el pasado sábado. En la foto podéis ver el estandarte de la hermandad antes de entrar en la Catedral por la Puerta Llana.

Más imágenes del acto en: http://burguilloscristodelafe.blogspot.com.es/


lunes, 10 de marzo de 2014

Siglo XXI


Esta instantánea tomada por Antonio Sacristán, en el año 2008, intentando reproducir el mismo ángulo y perspectiva de la foto de comienzos del siglo XX que, como indicábamos, pertenece a su familia, nos muestra el estado actual de la iglesia, con pocos cambios en el edificio, aunque alguno más en el entorno.

La fachada aparece ahora más uniforme y remozada, tras taparse los mechinales o huecos que se apreciaban en las anteriores fotografías, con motivo del último arreglo del tejado. Aunque su fin era evitar el anidamiento de las palomas, que tanto daño han causado en la iglesia en épocas pasadas, el método utilizado no ha sido muy acertado, destacando excesivamente el color blanco, sobre el anaranjado del ladrillo.

Como puede apreciarse, la hornacina superior de la portada está ocupada por una nueva imagen de Santa María Magdalena, de piedra blanca, aunque claramente se observa que nada tiene que ver con las trazas de la original, de estilo renacentista.


Vemos, por otra parte, una nueva campana que ocupa el hueco dejado por la anterior y como los árboles han sido sustituidos por cipreses, tras la reforma y re-decoración del mobiliario urbano que sufrió la plaza de la Constitución tras su reciente ampliación (finales de 2004 y comienzos del 2005).

Más evidente aún es el asfaltado de la calle, el paso de cebra que atraviesa la misma y el espacio y protagonismo que ahora toman los vehículos delante de la iglesia, convertida en zona de aparcamiento, además del ya de por sí trasiego de vehículos que circulan a diario por esta travesía que conduce a Cobisa. De ahí que la señal de ceda el paso siga ocupando el mismo antiestético sitio que en la foto anterior; incluso con unas dimensiones mayores, conforme a la moderna tipología de las señales de tráfico.

viernes, 7 de marzo de 2014

Ultimo tercio siglo XX


Otra nueva imagen de la fachada de la iglesia, esta vez de finales de los años setenta, tomada por el párroco de entonces, Don Jesús López Rey; en la que, pese a no apreciarse diferencias significativas con relación a la de mediados de siglo XX, sí hay algunos detalles interesantes a destacar, por lo que de ellos se puede extraer.

Fijaros en la esfera del reloj y compararla con la de las otras dos fotografias anteriores, y veréis como ha pasado de estar cada vez más ennegrecida  (incluso de faltarle la numeración de alguna de  las horas), a un color blanco impoluto; signo inequívoco de que fue sustituida entre estas dos últimas fotos, y no sabemos si incluso lo fue el propio reloj de la iglesia.

En esta foto aparecen ya, por primera vez, dos árboles que flanquean la puerta de la iglesia, así como otro que se vislumbra en la parte izquierda de la plaza. En los últimos tiempos estamos acostumbrados a ver estos lugares ocupados por algún árbol (aunque se hayan ido sustituyendo por otros de diferentes especies), pero como habéis visto en las fotos anteriores, no siempre han estado ahí.

Luego hay otras cuestiones de menor importancia, como la campana que se echa en falta en el hueco de la torre, en el cual sólo se mantiene el yugo de madera que la sujetaba. Sin embargo, aparece ya otro elemento más moderno que empezará a tener más importancia en lo sucesivo, como veremos en la próxima foto, y que no es sino la señal de ceda el paso que aparece en el lado izquierdo de la iglesia, junto a la base de la torre. Aunque todavía no aparece ningún vehículo aparcado en el entorno, como sucede en la actualidad, el tránsito rodado ya comenzaba a tomar protagonismo. Fijaros también en lo nivelada que sigue la plaza, en relación con las otras dos fotos.

Tanto en esta, como en las anteriores, no falta el elemento humano, algo muy tenido en cuenta en fotografía y que quizá hoy en día no cuidemos tanto, y que no es otro que la entrañable "señora Isidra", una mujer muy trabajadora, a la que se ve portando un saco con una carretilla de madera, de las que se utilizaban para transportar cántaros de agua. Con un poco de imaginación, y dada la dirección que trae, podemos suponer que viene del molino de Antonio, "el molinero", de recoger una molienda de cebada con la que se alimentaba a los cerdos o a las gallinas.

martes, 4 de marzo de 2014

Mediados de siglo XX


Esta otra imagen es de mediados de siglo XX (finales de los cincuenta, posiblemente) y en ella ya se pueden apreciar diferencias significativas en relación con la anterior de comienzos de siglo, desapareciendo los tres elementos que citábamos: la imagen de Santa María Magdalena, el crucero y la dependencia anexa a la torre. También puede distinguirse un campanillo en la espadaña que nada tiene que ver con el anterior y un acerado alrededor de la iglesia y en la calle Caño, fruto, sin duda, de la reconstrucción realizada en este entorno, a la conclusión de la guerra. En la torre de la iglesia, son visibles los daños causados durante la contienda, así como los reparos realizados. Destacar también las gradas que aparecen a la izquierda, para salvar el desnivel que ya se apreciaba en la foto anterior; así como el firme de la plaza y la calle, más nivelados, aunque todavía siguen de tierra, sin asfaltar ni solar, como aún era propio en la época.

sábado, 1 de marzo de 2014

Comienzos del siglo XX


Retomando nuestras anteriores publicaciones de fotos antigüas, hoy traemos al blog esta fotografía de la iglesia parroquial de Santa María Magdalena. Se trata de una fotografía perteneciente a la familia Hernández de Tejada, que pudo haber sido tomada en torno a los años 20 o 30 del siglo pasado.

Puede tratarse de un día de fiesta, ya que son muy numerosos los corrillos de hombres que hay a la puerta de la iglesia, abierta de par en par. El reloj nos indica que son las doce y veinte de un día bastante soleado, por lo que todos estos personajes van cubiertos con gorra o sombrero. Destacan, por otra parte, la figura del perro situado en primer plano, así como la mujer que se encuentra más a su derecha, que viste el luto de la época.

Otros tres elementos significativos, que desaparecieron con posterioridad, nos llaman poderosamente la atención:  se trata de la cruz y el fuste de piedra situados justo delante de la iglesia; la imagen original de la Magdalena que se observa el nicho de la parte superior de la portada barroca; y el "anejo" a la iglesia que hay en la parte izquierda, junto a la base de la torre, que siempre ha sido conocido por su función como osario. De estos tres elementos hablaremos más pormenorizadamente en una próxima entrada del blog.

Al fondo de la calle, a la izquierda, también se observa como una especie de empalizada. Y es que en la plaza de San Pedro, en una determinada época, se celebraban corridas de toros. La plaza se cerraba con carros y galeras y los toros parece que salían justo detrás de la iglesia, cruzando la calle hasta la plaza de San Pedro. Esto podrían atestigüar que se trata de una foto hecha durante la celebración de alguna de las fiestas patronales.