Esta fotografía está tomada alrededor de 1960 desde el comienzo del camino de la sierra, con la carretera nacional de Madrid a Ciudad Real cruzando en primer término. En ella pueden apreciarse los dos edificios escolares que constituían, en aquel entonces, el complejo estudiantil, junto con el patio de recreo que puede observarse en la parte delantera, todo él rodeado de una valla encalada, de estética completamente diferenciada. El edificio de la izquierda eran las escuelas propiamente dichas, mientras que el de la derecha, que hoy acoge la guardería (CAI) y clases de infantil, eran las casas de los maestros. Por aquel entonces se impartía una educación separada para niños y niñas, por lo que la parte derecha estaba reservada para la escuela de niños y la izquierda para la de las niñas; ambas separadas por un vestíbulo central al cual da acceso la puerta de entrada que se aprecia en la imagen,
Aunque la existencia de escuelas públicas en Burguillos, data del siglo XIX, este nuevo grupo escolar, se debe a la iniciativa del gobierno republicano que, durante la II República, construyó en España casi 10.000 edificios destinados a impartir una enseñanza primaria obligatoria, de carácter público y gratuito, tal y como se estableció en la Constitución de 1931.
La necesidad de construir un nuevo edificio destinado a albergar dos escuelas en Burguillos (una de niños y otra de niñas), data de 1935, siendo alcalde del Ayuntamiento de la localidad Don Venancio de la Cruz Agudo, financiándose la construcción con un crédito de 26.000 pesetas. En este proyecto se contemplaba también la construcción de otro edificio para uso de vivienda de los maestros.
La necesidad de construir un nuevo edificio destinado a albergar dos escuelas en Burguillos (una de niños y otra de niñas), data de 1935, siendo alcalde del Ayuntamiento de la localidad Don Venancio de la Cruz Agudo, financiándose la construcción con un crédito de 26.000 pesetas. En este proyecto se contemplaba también la construcción de otro edificio para uso de vivienda de los maestros.
Aunque las obras ya se habían iniciado, el estallido de la guerra civil interrumpió su ejecución durante los tres años que duró la contienda y algunos más; y no se retomarían hasta 1943, cuando la Dirección General de Regiones Devastadas se hiciera cargo del proyecto de reconstrucción y terminación de las escuelas y de las casas de los maestros iniciadas durante la República.
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