En entradas anteriores hemos hablado de la familia de los Sagredo o de los Tejada, linajes aposentados en nuestro pueblo hasta fechas muy cercanas a nuestros días o, incluso, con presencia en la actualidad. En esta ocasión quiero remontarme a épocas anteriores: siglos XVI, XVII y XVIII, durante los cuales se hizo presente en nuestro municipio el linaje de los Dávila.
Capilla lateral de la Iglesia Parroquial (Burguillos de Toledo)
Es mucha la información de que disponemos al respecto, pero quiero centrar esta primera reseña en los orígenes de este apellido de pobladores de las tierras de Ávila, que fue extendiéndose, o evolucionando desde al menos el siglo XI, mediante enlaces y pactos familiares que dieron origen a diversas líneas sucesorias. La de los Dávila burguillanos, no sería sino una de ellas, que pudo emparentar, a través de su rama troncal, con otros famosos personajes abulenses o, incluso con los propios progenitores de Santa Teresa de Jesús, pues su madre, Beatriz Dávila Ahumada, tenía esta misma ascendencia.
Aunque lo habitual es nombrar a Santa Teresa como Teresa Sánchez de Cepeda y Ahumada, en algunos documentos aparece citada de manera más completa, apareciendo con los apellidos Sánchez de Cepeda, por su padre, pero también -y especialmente- Dávila y Ahumada, por su línea materna. Y es que el apellido Dávila tenía su importancia y protagonismo en la época, y así quiso hacerlo constar la familia Cepeda y Ahumada, no sólo incluyéndolo en sus apellidos, sino en su propio escudo de armas, aún a pesar de su alejamiento del tronco central de este linaje.
Vayámonos a la ciudad de Ávila y allí podremos documentarnos aún más a este respecto y, si cabe, a través de imágenes más concretas que así lo atestigüen (fotografías que ilustran este artículo más abajo). Empecemos, por tanto, en la misma plaza denominada hoy "Plazuela de Pedro Dávila" donde nos encontramos con un escudo formado por dos cuarteles que representarían a los apellidos del matrimonio Dávila Córdoba, propietarios de la casa-palacio que da nombre a este lugar y en una de cuyas ventanas podemos leer una inscripción con sus nombres y, sobre la misma, un frontón timbrado de nuevo con el escudo de Don Pedro de Avila y doña María Enriquez de Córdoba.
Cerca de esta plaza encontraremos la conocida como Iglesia de Santa Teresa de Jesús, que se levanta sobre el solar de la antigüa casa natal de la Santa. En ella tenemos el ejemplo más palpable de la relación entre la familia de Santa Teresa de Jesús y el linaje Dávila. Allí podremos observar diversos escudos de la familia Cepeda y Ahumada, situados en diversos lugares del edificio, como la propia fachada de la iglesia o la entrada a la capilla levantada donde nació la Santa.
Finalmente, podemos visitar la iglesia del primer convento de la orden de Carmelitas descalzas fundado por Santa Teresa en la ciudad. En una de sus capillas encontraremos el enterramiento de uno de sus hermanos, Lorenzo de Cepeda Dávila y Ahumada, como así reza en su epitafio. Sobre su tapa, el escudo de la familia, y como en todos los anteriores que hemos citado, el cuartel del apellido Dávila como denominador común, formado por seis roeles de azur sobre campo de oro.
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